Distopía
Distopía es el termino
opuesto a utopía. Como tal, designa un tipo de mundo imaginario, recreado en la
literatura o en el cine, que se considera indeseables. La palabra distopía se
forma con las raíces griegas que significa malo u y que puede traducirse como
lugar.
Esto plantea un mundo
donde las contrataciones de los discursos ideológicos son llevadas a sus
consecuencias más extremas.
Este sentido, la
distopía explora nuestra realidad actual con la intención de anticipación como
ciertos métodos de conducción de la sociedad podrían derivar en sistemas
injustos y crueles. Por ejemplo, una nación donde se ejerza un riguroso control
estatal para garantizar una sociedad organizada, feliz y conforme, podría derivar
en un régimen totalitario, que reprime al individuo y cercana sus libertades en
función de un supuesto bienestar general.
Utopía
Por utopía se entiende
la “representación imaginativa de una sociedad futura de características favorables
del bien humano”, esto es, un gobierno político tan perfecto e idealizado que
es prácticamente imposible llegar a él, la palabra proviene del helenismo Utopía.
Las utopías tecnológicas se basan en la creencia de
que los avances en ciencia y tecnología conducirán a una utopía, a al menos ayudarán
a cumplir de algún ideal utópico.
La utopía moderna
Muchos autores, han
indicado que las utopías modernas son esencialmente diferentes a sus
predecesoras. Otros en cambio, señalan que en rigor las utopías solo se dan en
la modernidad y llaman cronotopias o protoutopias a las utopías anteriores a las
obras de Moro. Desde esta perspectiva, las utopías modernas están orientadas al
futuro, son tecnológicas, progresistas y sobre todo son un reclamo frente al
orden cósmico entendido religiosamente, que no explica adecuadamente el mal y
la explotación. Así las utopías expresan una rebelión frente a lo dado en la
realidad y propondrían una transformación radical, que en muchos casos pasa por
procesos revolucionarios, como expreso en sus escritos Karl Marx.
Se ha criticado que las
utopías tienen un carácter coercitivo. Pero también se suelen añadir que las utopías
le otorgaban dinamismo a la modernidad, le permiten una aplicación de sus bases
democráticas y han sido una especie de sistema reflexivo de la modernidad por
lo cual esta ha mejorado constantemente. Por ello no sería posible entender la
modernidad sin su carácter utópico.
Las utopías han tenido
derivaciones en el pensamiento político, como por ejemplo en las corrientes
socialistas ligadas al marxismo u anarquismo, literario e incluso cinematográfico
a través de la ciencia ficción social. La clasificación más usada, hereda la pretensión
del marxismo de estar elaborado un socialismo científico y por lo tanto
restringe el nombre de socialismo utópico a las formulaciones ideológicas anteriores
a este, aunque todas ellas comparten su origen en la reacción a la revolución industria,
especialmente a la condición del proletariado siendo vinculación al movimiento
obrero más o menos próxima o cerca de ello.